MÚSICA EN LA PREHISTORIA


MÚSICA EN LA PREHISTORIA





La mayoría de los especialistas apuntan al Paleolítico superior como el período determinante para la maduración del hecho musical en los primeros estadios de la humanidad. Se han señalado especialmente los períodos Solutrense (21000-17000 ac) y Magdaleniense (17000-10000 ac.), por ser en ambos en donde aparece el mayor número de indicios de la actividad sonora de los primeros homínidos. Para rastrear esta huellas de historia debemos acudir a dos tipos de testimonios: El arte rupestre y los vestigios de primitivos instrumentos, ambos siempre tomados con las debidas precauciones.

Algunas representaciones plásticas prehistóricas parecen sugerir que los primeros seres humanos ya se interesaban por la producción de sonidos. Ejemplos de ello son la figura antropomorfa de la cueva de trois-Fréres, situada en la localidad francesa de Montesquieu-Avant, ubicada en el departamento de Ariége, en el suroeste del país, la cual parece blandir un instrumento musical, tal vez un arco primitivo o una flauta, o, asimismo la conocida como Venus de Laussel, aparecida en la localidad de Marquay, en el departamento de Dorgone, también al suroeste de Francia, que porta lo que aparentemente es un cuerno animal, de bisonte tal vez, instrumento ampliamente utilizado en diversas culturas a lo largo de la historia.  



Venus de Laussel.




Acercándonos a los objetos, se han hallado huesos perforados de animales, falanges de reno o huesos de grandes aves, constituyendo lo que sería primigenios tipos de silbato o flauta. Algunos cuentan con tres o más agujeros. A través de estos últimos, resulta posible especular cómo el hombre de la época empieza a construir cierta conciencia música dado que no se trata de artefactos que emiten simplemente un sonido, sino que pueden dar diversas alturas, esto es, diversos tonos. Quizá estamos ante un primer ordenamiento del sonido. Pero, además de flautas, han aparecido a lo largo de todo el siglo XX, especialmente en suelo francés, en yacimientos como La Roche, Laugarie-Basse o Badegoule, todos en Dordoña, o Lespugue, en el departamento de Haute-Garonne, también en el suroeste del país, numerosos resto de lo que se conoce como rombos. Se trata de una pieza plana, de piedra, hueso o madera, cuya longitud puede variar entre los quince y veinte centímetros, a la cual se le ata una cuerda en uno de sus extremos para que, haciéndola girar con ímpetu en el aire, se consiga crear un fuerte y penetrante zumbido. De todos estos instrumentos, incluidos diferentes variedades de litófonos, idiófonos de percusión hechos en piedra o de tambores procedente ya de la época neolítica (entre el 10000 y el 3000 a.c aproximadamente), como el membranófono de arcilla aparecido en Bernburg, en el estado de Sachsen-Anhalt, en el noreste de Alemania, datado entre el 6000 a.c. y el 3000 a.c., se han realizado reproducciones con útiles semejantes a los que podía tener a su disposición el hombre primitivo, habiéndose comprobado la viabilidad de los mismos tanto en su factura como en su sonoridad.

Una posible interpretación: la supervivencia puede pasar por la entonación de los sonidos apropiados para propiciar la caza. Animales y figura antropomorfa en la Trois-Frères, Francia.

Tomado de: Breve Historia de la Música. Javier María López Rodríguez

Acerca del autor

Admin
Dejame tu mensaje.

0 comentarios:

Copyright © 2013 EDMÚSICO and Blogger Themes.